En la pasada reunión de Junta Directiva de la Asociación Española de Campos de Golf, se ratificaron las altas de siete nuevas instalaciones, mediante las cuales la organización alcanza en solo tres años desde su fundación (noviembre 2015), una cuota de representatividad del 50% en el ámbito empresarial de su actividad, generando de forma directa más de 5.000 puestos de trabajo.
Se suman en esta ocasión como socios de pleno derecho, Calanova Golf Club, Real Club de Golf de San Sebastián, RACE, Doña Julia Golf Club, Villapadierna Golf Club, Miguel Ángel Golf Academy y Miraflores Golf, que pasan a formar parte del colectivo de campos que conforman la Asociación Española de Campos de Golf.
En estos momentos la AECG cuenta ya con representación en la práctica totalidad de las comunidades autónomas de España, siendo Andalucía con 42 campos la que cuenta con mayor representación, siguiéndole la Comunidad Valenciana con 28 instalaciones, las Islas Baleares y la Comunidad de Madrid con 19, Cataluña con 18, la Región de Murcia con 11 y las Islas Canarias con 10. Las dos Castillas suman 8 campos, Navarra 2, País Vasco 5, Galicia 4 y las comunidades de Cantabria, Aragón, Extremadura, y La Rioja con tan solo un miembro cada una de ellas.
Los próximos retos de la Asociación en este sentido son seguir creciendo en número de instalaciones en aquellas comunidades donde el grado de penetración es menor, siendo el objetivo de la actual junta directiva alcanzar los 200 campos asociados antes de que finalice su mandato en 2020. El crecimiento de la organización ha sido exponencial, multiplicando su número de socios por 4 en los últimos tres años, dado que en noviembre de 2016 cuando la misma tomo posesión, contaba con 46 miembros.
Para la presidenta de la Asociación Española de Campos de Golf, Claudia Hernández, “dicho crecimiento responde a la necesidad real de constituir una organización que defendiera los intereses empresariales del sector del golf ante todos los agentes económicos y sociales implicados en su actividad. Se han sumado muchas, pero aún queda un 50% que debería afiliarse en un ejercicio de responsabilidad, ya que cuando alcanzamos algunos de los retos marcados se beneficia el colectivo con independencia de si forman parte o no del proyecto”.